Jugadoras nativas cachacas del equipo de sóftbol femenino sub 18 de Bogotá
La nueva fuerza del sóftbol femenino colombiano concentrada por estos días en Cali en el Campeonato Nacional juvenil clasificatorio a los Juegos Nacionales está marcando un futuro promisorio hacia la categoría de mayores en el país, por el amplio volumen de participantes y potencial que muestra gran parte de las deportistas en competencia.
Si bien hay regiones que tradicionalmente han sido potencia, como Bolívar, Sucre, Córdoba, otras van haciendo camino, con jugadoras refuerzos de otros departamentos, inclusive fuera del país, pero sin dejar de vista la oportunidad para sus raizales.
Un ejemplo es Bogotá, novena ganadora en sus dos primeras salidas, que llegó a participar en el selectivo de Cali con un equipo competitivo, y aunque reforzado con algunas atletas de la Costa Atlántica y Estados Unidos, también agrupa un buen volumen de raizales cachacas, diez en total, que constituyen la fuerza futura del sóftbol femenino bogotano.
Rebeca Valera, Ricelis Quintero, Manuela Pimiento, Camila Vivas, Danna Bravo, Juliana Vega, Mariana Hernández, Mariana Bravo Naisla Chacón y Sara Soto, son las cachacas que integran la novena capitalina que dirige Wilmer Bustillos y buscan su clasificación a los Juegos Nacionales de la juventud, Eje Cafetero 2024, cuya sede será el estadio Simón Carbonell de Cali en el mes de noviembre.
“Trajimos al clasificatorio diez jugadoras nacidas en Bogotá porque queremos que aumente el volumen de cachacas jugando sóftbol. El objetivo es que las niñas que nos refuerzan de otras regiones dejen un legado a nuestras jugadoras en evolución para solidificar un buen futuro de nuestro sóftbol femenino”, testimonio del presidente de la Liga de Sóftbol de Bogotá, Félix Mesa.
Publicación: Silvio Zamora Ramírez
Director, Radio Voz Stereo Internacional.
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