Acción de juego partido América Millonarios en el Pascual Guerrero. Foto Dimayor
Más allá de jugar, bien o bonito, la premisa de América de Cali en los más recientes juegos ante Alianza Petrolera y Millonarios era ganar y así lo hizo para estar parcialmente entre los ocho mejores en la primera división del fútbol Colombiano.
Ante los santandereanos, tuvo los primeros 15 minutos de buen juego donde logró un gol y luego decayó su nivel, pero le alcanzó para anotar dos goles y ganar con ese marcador ante un rival muy liviano y colero del campeonato.
En la fecha 16 enfrentando a Millonarios en el Pascual Guerrero, tampoco apareció el buen jugar, pero el resultado de tres puntos sí, y en estas circunstancias donde sumar es la premisa las formas pasan a un segundo plano.
Los Rojos de Juan Cruz Real se encontraron con un rival fogoso, con jugadores jóvenes y de buen pie que pudieron hacer daño y así estuvieron hasta faltando diez minutos para finalizar el partido cuando ganaban 1-0, con el gol del primer tempo del joven delantero nacido en Carepa Antioquia, Diego Abadía.
Los embajadores olvidaron que al frente tenían un equipo que si bien no encontraba su fútbol, la ambición la tenía latente y con más ímpetu que juego hacían por el empate. Fueron solo cinco minutos de parpadeo del kínder de Gamero para que América ya estuviera montado en el juego con un marcador de 2-0 a su favor con goles de Luís Sánchez y Marlos Torres, resultado final del juego.
Los azules capitalinos se conformaron con el 1-0, o tal vez se confiaron que los rojos no les podían hacer daño al no jugar bien. Si hubiesen mantenido el ímpetu ofensivo del primer tiempo habían podido llevarse buen boletín, pues cuando intentaron arrimarse al arco de Graterol, fueron factor de riesgo.
Los Rojos de Cali, octavos con 25 puntos, deberán defender a toda costa esa posición entre los mejores ocho con buenos resultados en los juegos restantes con Equidad en Cali, Jaguares en Montería y Tolima en el Pascual Guerrero.
Por : Silvio Zamora Ramírez
Periodista Acord
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